Según los datos con los cuales se cuenta actualmente indican que los españoles dentro de sus hábitos de consumo suelen hacerlo en un porcentaje muy mínimo en elementos farmacéuticos como lo son las medicinas, las vacunas, vitaminas o anticonceptivos orales, comparados con otros gastos como lo son belleza, telefonía, tabaco o cerveza.
Todo parece indicar que los españoles gastan menos en medicina que en cerveza lo que causa un gran impacto, puesto que la población no se preocupa mucho por su propia salud y bienestar.
Todos estos datos fueron extraídos de un boletín que se hizo público en el Instituto Nacional de estadística, en la cual el porcentaje de gastos relacionados con la farmacéutica no sobrepasa el 3% anual si se comparar con otros elementos como los que mencionamos al inicio.
Las encuestas y sus resultados han demostrado que el gasto que se realiza en productos de tipo farmacéutico ha tenido una reducción del 5% en comparativa como otros años, como por ejemplo en el 2013.
Las personas han comenzado a tener otro tipo de prioridades por ello se sabe que invierten más en telefonía y en recreación que en aspectos que tengan que ver con su salud.
La cultura de los españoles entonces se basa más en lo relacionado con la tecnología, la estética y la comida, que en los que tienen que ver con el tratamiento de enfermedades o en el mejoramiento de la salud.
Y es que no debería alarmarnos este tipo de resultados, la idea de que los españoles gastan menos en medicinas que en cerveza es cierta, por lo general la población en edad apropiada consume grandes cantidades de alcohol, especialmente en los fines de semana.
El consumo de bebidas es mucho más alto de lo que esperaba al igual que el tabaco. Sin embargo las cosas se siguen resumiendo en la misma conclusión, todo es una cuestión de prioridades, y para los españoles sus prioridades se basan en la tecnología con respecto al uso de sus teléfonos móviles, se basa en los estético, gastos de peluquería y otros tratamientos similares, la recreación como las vacaciones entre otros sitios, y por último tenemos la comida en la cual se incluyen las bebidas.
Un último lugar, por supuesto es ocupado entonces por los productos farmacéuticos dentro de los cuales podemos tener como conclusión que las mujeres en España suelen consumir pocos anticonceptivos orales y se deciden por otros métodos de planificación. También es cierto que el consumo de suplementos entre otros está muy por debajo de la cerveza.
No se sabe con exactitud cómo podrán evolucionar estos resultados en otros par de años, lo que sí se sabe es que el sector farmacéutico debe pensar en algunas estrategias que hagan que los usuarios se preocupen más por su salud y por el consumo adecuado de medicamentos que contribuyen a tener un cuerpo y mente sanos.